Nunca se es demasiado joven para reciclar
Involucrar a los niños en el reciclaje es importante porque les ayuda a desarrollar valores, habilidades y hábitos que les serán útiles en la vida adulta:
- Conciencia ecológica
- Los niños aprenden que sus acciones afectan al medioambiente y que es importante preservarlo.
- Responsabilidad
- Los niños aprenden que sus acciones tienen consecuencias y que deben ser responsables.
- Solidaridad
- Los niños aprenden que sus acciones afectan a todos.
- Orden
- Los niños aprenden a procesar los desechos de manera ordenada y a colocarlos en su lugar.
- Habitos sostenibles
- Los hábitos adquiridos en la infancia tienden a perdurar en la vida adulta.
- Imaginación y creatividad
- Los niños pueden desarrollar su imaginación y creatividad al fabricar objetos con materiales reciclados.
- Aprendizaje significativo
- Los niños pueden aprender de manera significativa si el reciclaje se convierte en una actividad divertida que se comparte en familia.
Reciclar también ayuda a preservar los recursos naturales, reducir la contaminación y ahorrar dinero.